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lunes, 23 de noviembre de 2015

Crecer en pareja

Como en todas las relaciones interpersonales, la relación de pareja, necesita tiempo y cuidado para que se mantenga y para que sea satisfactoria.

A continuación, os dejamos algunas estrategias que quizás ya pongáis en práctica o que quizás os gustaría comenzar a hacer:
Imagen: McLac2000, con licencia Creative Commons

  1. Daos cuenta de cuáles son las conductas que os gusta que haga vuestra pareja y decídselo. Muchas veces hay pequeños gestos que vuestra pareja hace, y que por la cotidianidad, ni siquiera nos percatamos. Os propongo que durante los próximos días focalicéis vuestra atención en estos gestos: que te dé las buenas noches antes de dormir, que elija una película pensando en tus gustos, que compre tus yogures favoritos… y que una vez que os hayáis percatado, os lo hagáis saber.
  2. Cread simbología en la pareja. Pueden ser muchas las personas que califiquen como ‘cursis’ o ‘poco importantes’ las fechas de inicio de una relación, las canciones que recuerdan algún momento especial, lugares, etc. Pero lo interesante es, que desde la psicología de pareja, se recomienda la existencia de los mismos. Facilitan el recuerdo de momentos agradables y gratificantes que orientan la conversación, los pensamientos y las emociones hacia tintes positivos.
  3. Planificad tiempo libre en común. ¡Ojo! Que la recomendación NO es ‘limitad vuestro tiempo libre a vuestra pareja’. La recomendación es crear actividades placenteras que favorezcan vuestra unión. No limitéis vuestro tiempo en común al tiempo de descanso o al de convivencia. Buscad actividades que os agraden y que favorezcan momentos divertidos y distendidos.
  4. Comunicaos clara y objetivamente.Dame un buen beso, un abrazo  y dime que me quieres”, ¿sabéis lo fácil que son las cosas cuando tu compañero@ te dice lo que quiere?, ¿Lo que necesita?, ¿Poder dárselo? ¡Tal cual!. Decirle: ´´nada, estoy bien´´ y pretender que adivine que necesitas un buen beso, un abrazo y que te diga que te quiere… es como si vas al McAuto y sin decir nada ¡¡esperas que te den la hamburguesa que te apetece con la bebida que te va a sentar mejor en ese momento y las patatas que más te gustan!!
  5. No os convirtáis en adivin@s. Si antes decíamos que no esperemos que nuestra pareja sea adivina….¡no juguemos nosotros a ser adivinos!. Si antes decíamos: ¡habla y pide!, ahora decimos: ¡pregunta directamente!. Con esto quiero decir que no infiráis lo que el otro piensa, siente o desea. “Cariño, te noto triste ¿estás bien?”, “¿quieres que me quede contigo?”, “no me llamaste en todo el día, ¿ha sido por algo?”, “¿me quieres?”.
  6. Negociad. No me pararé demasiado a explicar este punto, ya que en sí mismo conllevaría incluso más de una entrada. En términos sencillos, fomentad en la pareja espacios para negociar aspectos en los que haya desacuerdo. En dichos espacios es importante que ambas partes estén dispuestas a ceder, ya que el compromiso y la cooperación mutua facilita en el otro la disposición al cambio. Muy importante: no exijas, sugiere. “¡Pídele el coche a tus padres!¡Siempre lo hago yo!” vs. “¿Qué te parece si esta vez le pides tú el coche a tus padres?, me siento un poco pedigüeña en casa”. ¿Ante cuál petición te sentirías más receptiv@?.
  7. Tened sexo. Numerosos autores, como Sternberg, afirman que la satisfacción en la pareja está estrechamente relacionada con el mantenimiento de actividad sexual en la misma.
  8. Expresad vuestras emociones. Hay personas a las que esta parte les resulta incómoda, difícil y/o incluso inútil. Sin embargo, en la pareja, la expresión de las emociones ayuda, como decíamos antes, a que la otra persona no asuma el papel de adivino, a que se fomenten aquellas cosas que os hacen sentir bien y a buscar soluciones para aquello que os disgusta. “la conversación me está haciendo sentir mal y agresivo”, “me encanta que hayas venido a buscarme”, etc.
  9. Buscad y encontrad soluciones a los problemas. No os restrinjáis a expresar lo que os disgusta/molesta/enfada, proponed soluciones y pensad las estrategias para llevarla a cabo.
  10. Cuando discutáis, hacedlo ‘partido a partido’, es decir, no mezcléis varios campos de batalla a la vez. Cuando os dispongáis a hablar de algún tema conflictivo sed muy cuidadosos de hablar únicamente ese conflicto. Introducir más desacuerdos a la discusión dificultará el encontrar una solución al problema y no facilitará un clima emocional adecuado para ello.
Te proponemos que leas este decálogo con tu pareja y que vosotros mismos descubráis cuáles son vuestros puntos fuertes y vuestros puntos débiles. De esta manera pondréis en práctica el punto 1, ya que descubrirás de entre estos 10 puntos que cosas te gusta que haga tu pareja y se lo harás saber; el punto 2, porque compartiréis tiempo libre juntos y el punto 9, porque detectaréis los puntos débiles y podréis proponer estrategias para solventarlos.

Éstas son algunas de las pautas que se aprenden en terapia de pareja, y que psicólogos y profesores recogen dentro de libros e investigaciones. Algunos de estos autores que os invitamos a leer son: Carmen Serrat, Miguel Costa y Liberman.

¡A crecer en pareja!


Artículo redactado por Alba Luque, terapeuta del CPA.

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